“Hay que hacer mucha pedagogía para que la gente aprenda el valor diferenciado de lo que se le está ofreciendo con la moda sostenible”

Hola!

Feliz jueves a tod@s! Esta semana os traigo la entrevista que le pude realizar a Àngels Biosca de Slowear Project. Un proyecto bonito donde los haya y que se merece la mayor difusión posible. Estoy totalmente de acuerdo con Àngels en que el cambio hacia una sociedad más sostenible pasa por una concienciación en las aulas y en las familias. Su proyecto es una clara muestra de que poco a poco esto se puede ir haciendo. Aquí os dejo la entrevista. Espero que la disfrutéis y aprendáis tanto como yo ¡Ha sido un placer Àngels!

Antes te dedicabas al mundo de la ópera ¿Qué fue lo que te hizo cambiar ese mundo por el de la moda sostenible? Ese ha sido mi mundo desde que era pequeña y mi vida profesional ha girado alrededor de la música, hasta que apareció la moda sostenible y me conectó con otras cosas que también quería hacer en mi vida. Un ERE en mi trabajo hizo posible el cambio de rumbo.

Àngels Biosca, Slowear Project

En estos momentos estás de lleno en tu proyecto The Slowear Project ¿De qué se trata exactamente? Se trata de un proyecto que en el que quiero concienciar a las personas hacia otra manera de vestir y hacerles protagonistas del cambio que creo que necesita el mundo. Las formas de hacerlo son variadas: comunicando sobre ello en internet en mi blog y fuera de él, sensibilizando a los escolares y familias en talleres presenciales y también participamos en eventos sobre moda slow y moda sostenible y costura, acercando al consumidor las alternativas que tenemos más a mano. No es fácil, pero hay que posibilitar que la gente valore el producto directamente. También empezamos a hacer nuestros pinitos en el diseño de bisutería y otros productos con textil reciclado.

Dentro de tu proyecto está Costura Inquieta ¿En qué consisten estos encuentros sociales? Se trata de crear ocasiones para que la gente valore el proceso artesanal de hacer ropa y complementos. Acude tanto gente que domina la costura o el ganchillo, como quien no tiene idea pero quiere aprender. Es muy gratificante para todos los participantes y se intenta aportar algo especial: un lugar inesperado, un momento señalado en el calendario, una acción cultural o social que nos apetece dar a conocer o compartir… o simplemente disfrutar del presente con las manos ocupadas y ¡mucha alegría!

En este mundo abocado al consumismo de prendas provenientes del fast fashion ¿Crees que la moda sostenible se podrá hacer hueco en un futuro próximo? Estoy convencida. La gente sabe muy bien qué es bueno y qué no, pero nos cuesta cambiar de hábitos porque hay una poderosa inercia que nos lleva arrastrando décadas, impidiéndonos pensar y decidir cómo queremos vestir. Hay mucho trabajo por delante para facilitar esos cambios, pero somos muchos ya y esto no tiene vuelta atrás. Hay que ilusionar hacia este lado de la moda sostenible.

Costura Inquieta en Horts Benimaclet

¿Qué crees que puede aportar al mundo que la gente vaya concienciándose en el campo de la sostenibilidad? Esa es la única manera de cambiarlo. Y la necesidad de que eso ocurra ya está demostrada con toda la crisis económica y de valores que estamos sufriendo. Hemos de confiar y probar otros modos de hacer las cosas a todos los niveles. Cada uno en su casa parece que no pueda hacer nada, pero si vamos sumando en prácticas reales influiremos rotundamente en ello.

¿Cuál crees que es la mejor forma de acercar a la sociedad la moda sostenible? Hay que ofrecer producto, pero también hay que hacer mucha pedagogía para que la gente aprenda el valor diferenciado de lo que se le está ofreciendo. Las dos cosas van de la mano, según mi opinión. Y además se puede aprender a comprar de forma más responsable e incluso hacerse la ropa, intercambiarla, prestarla…

La educación es la base para que una sociedad avance ¿crees que la moda sostenible debería formar parte del currículum de los alumnos? Absolutamente. La sostenibilidad es un concepto transversal y clave en los tiempos que corren. No es un lujo, es una necesidad que se explique en todos los niveles educativos, se aprenda a ponerlo en práctica en nuestras vidas no sólo en lo que a moda se refiere. Pero sin que lo apliquemos fuera de la escuela tampoco funcionaría. Ha de estar en el cole y fuera del cole, por eso es importante formar a las familias y a los ciudadanos en general.

Eres una persona muy emprendedora ¿cuáles son tus futuros proyectos? Bueno, desarrollar todos mis propósitos en The Slowear Project es mi presente y mi futuro. La parte pedagógica, aplicarla diseñando talleres y charlas ocupa gran parte de mi interés, pero soy muy inquieta y siempre estoy inventando nuevas maneras de hacer aquello que quiero.  La parte en la que me estoy centrando es la comunicación y divulgación y colaboro escribiendo en varias plataformas especializadas. Una de las cosas que me gustaría ahora mismo es ayudar a pequeñas marcas de moda sostenible en su comunicación con el público, porque escribir y hablar me resulta un medio muy natural y cuando uno se lo hace todo no tiene tiempo de cuidar esos detalles, pero hoy por hoy los blogs son la nueva forma de hacerse publicidad en internet, y en tiendas y eventos también importa saber lo que estás comprando. Espero ir poniendo mi granito de arena y contribuir a que la moda se haga y se consuma de forma más sostenible.